Hotel Penzion A Restaurant Barbora 4*
Servicios principales
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Wi-Fi
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Parking gratuito
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Actividades
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Comida/Bebida
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Salas de reuniones
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Agradable para niños
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Desayuno
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No se permiten mascotas
Ubicación
Situado en el centro de Kutná Hora, el hotel Penzion A Restaurant Barbora, de 4 estrellas, ofrece acceso rápido al Chocolate Museum & Chocolaterie Kutna Hora a 8 minutos a pie del hotel. El hotel sirve comida europea preparada en el restaurante a la carta del hotel.
El centro de Kutná Hora se encuentra a 10 minutos a pie de la pensión, y atractivos culturales como Gothic Stone Fountain están a menos de 6 minutos andando del hotel. El Penzion A Restaurant Barbora Kutná Hora está a 5 minutos caminando de la Iglesia de Santa Bárbara y a 45 km del aeropuerto Pardubice. Este lugar también está alrededor de 25 minutos a pie de The Cemetery Church of All Saints with the Ossuary.
Con vistas a la iglesia, algunas habitaciones del Penzion A Restaurant Barbora ofrecen suelo de moqueta y ventanas insonorizadas con un sofá y un escritorio. Algunas habitaciones están equipadas con un cuarto de baño privado con secadores de pelo y artículos de tocador para huéspedes. Las habitaciones de huéspedes en este hotel incluyen almohadas de plumas, almohadas de plumón y almohadas de plumón/pluma. Algunos cuartos de baño disponen de ducha, así como de artículos de tocador para huéspedes.
Se sirve desayuno todas las mañanas en el restaurante. El Penzion A Restaurant Barbora cuenta con el restaurante Restaurace Barbora.
Reseña de un crítico de hotel
Recientemente pasé un fin de semana en Penzion A Restaurant Barbora, en Kutná Hora, y la experiencia fue de lo más encantadora. La habitación en la que me alojé contaba con un pequeño balcón y una vista impresionante de la Iglesia de Santa Bárbara, que iluminada por la noche parecía sacada de un cuento, dominando el paisaje con su majestuosidad. El desayuno variado fue un verdadero deleite: disfruté tanto del buffet como del servicio a la carta, apto para cualquier amante del buen comer. Pero lo que realmente me sorprendió fue la atención del personal: un miembro del equipo amablemente se ofreció a lavar mi ropa cuando llegué un sábado y ya no había lavandería abierta. ¡Ese tipo de gesto no se ve todos los días! La ubicación es perfecta, con fácil acceso a los principales sitios de la ciudad y un bar acogedor para relajarse después de un día de exploración. Sin duda, este lugar es un regalo tanto para los amantes de la cultura como para los paladares exigentes. ¡Volveré!
